Con Agradecimiento

by | Apr 9, 2020

Personal diocesano durante una reunion de la mañana y siguiendo la enseñanza de Jesús de amarse unos a otros.

Al igual que ustedes, aquellos de nosotros en el personal diocesano hemos pasado las últimas semanas tratando de averiguar “la nueva normalidad” y, caramba, se siente como que cambia cada día. Al igual que ustedes, hemos girado desde las reuniones en persona hasta todas las cosas en Zoom–con un montón de mensajes de texto, llamadas teléfonicas y correos electrónicos para llenar los vacíos. Hemos descubierto las cosas por prueba y error; riendonos, llorando, preocupándonos y encontrando alegría en momentos preciosos de conexión. Hemos hecho mucho de eso juntos cada día de semana por la mañana durante las reuniones regulares de nuestro personal. Durante esta Semana Santa, como ustedes, hemos seguido el camino de Jesús a Jerusalén en nuestro estudio bíblico diario. Cada pasaje de la Escritura nos fundamenta, recordándonos por qué estamos aquí, por qué servimos a la gente buena de la Diócesis Episcopal de Washington, y por qué amamos a Dios.